El jazz latino es un tipo de música practicada en muchos lugares del mundo, la cual ha alcanzado una importante difusión, práctica y visibilidad en los diferentes circuitos musicales y melómanos. La escena musical alemana cuenta con el cuarteto de jazz latino César’ salad, dirigido por un músico latinoamericano el cual es acompañado por un trío de músicos alemanes cómplices de este proyecto.
Por ese grado de asimilación, disposición y desarrollo de la música de índole afro-latino-americana, por parte de experimentados músicos, la práctica y discurso musical elaborado de jazz latino consigue arribar a puerto seguro en Alemania. La madurez y empaste sonoro alcanzado por esta formación constituyó una de las buenas noticias para el jazz latino en 2009. El desarrollo rítmico conseguido sitúa el piano y las congas en un plano protagónico, secundados idóneamente por el desempeño del bajo y la batería. En tal sentido, la agrupación consigue distanciarse de las concepciones clásicas de los cuartetos -básicamente tríos clásicos de jazz, ampliados con percusión latina- como los liderados por Nat King Cole, Errol Garner, Billy Taylor y Red Garland, entre otros, en los cuales se utilizó la percusión afrocubana como elemento más complementario y menos solista.
El acierto interpretativo se complementa con el repertorio escogido, el cual en este caso considera obras mayores del jazz latino y americano. El conguero panameño César Granados, estudiante de ciencias, se ha destacado en Alemania con su labor artística desde los años 80’s. En 1980 junto a Rudy Fuesers, tomó parte en la fundación de la orquesta Conexión Latina -como timbalero-, la banda más importante de música afro latina en la historia de ese país. Conexión Latina ha sido por años un colectivo multinacional de la mayor relevancia artística en Alemania y Europa. Granados en dicho país tuvo la oportunidad de trabajar y grabar con destacadas agrupaciones como Irazú.
El disco inicia con la pieza Jamilah, la cual es trabajada con ritmo de songo y pasajes de cha cha chá, el grupo brinda con este número un tributo a la obra de Henry Pucho Brown y sus Latin Soul Brothers. El corte Afrolypso reproduce la intención original de su compositor Mongo Santamaría: proporcionar un sabroso y cadencioso tumbao, reafirmado con el lucimiento solista de César Granados en el solo de Congas. Liberated brother, tema de la autoría del pianista Horace Silver, es uno de los más interesantes, en el mismo encontramos el solo de bajo de Jerker Kluge. El insoslayable Manteca, himno del cubop, lugar común una y mil veces revisitado, es la oportunidad idónea de César Granados para saludar la memoria de tamboreros de fundamento como Chano Pozo y Tataguines, con éste último Granados tuvo la ocasión de tocar en una gira en 1992. El tumbao nostálgico y contenido llega de la mano del pianista Jo Junghanss, su arreglo e interpretación pianística de la clásica canción Sunny de Bobby Hebb, clasifica entre nuestras preferidas. Bolivia, grabada por Freddie Hubbard, registra aquí el lucimiento del baterista Hajo Von Hadeln y del propio Jo Junghanss en el piano. Afrodisia en esta ocasión evidencia el carácter libertario e impredecible del jazz. La música del Brasil es considerada también, por ello se incluyó la pieza de bossanova Nana, del fallecido compositor y arreglista Moacir Santos, esta obra fue creada para una banda sonora. Batucada Surgiu es un número de samba de Marcos Valle.
César’ salad presenta un formato reducido con el cual ofrece un máximo frescor de jazz latino acústico, realizado en Europa.
Por Roberto Carlos Luján
Perfect Toy – 2009
