Por Roberto Carlos Luján
El año 1993 fue uno de los más tristes para la música afro-latino-americana. El seis de enero se informó la noticia sobre la muerte del trompetista estadounidense Dizzy Gillespie, figura cimera en el jazz de los años cuarenta, exponente principal del bebop y cubop. De tal manera, el año iniciaba con la pérdida del más ‘afrocubano’ de los héroes del jazz estadounidense. Ese año fue más trágico de lo registrado hasta ahora, junto a los fallecimientos ampliamente reseñados de Héctor Lavoe, Louie Ramírez y Mario Bauzá, se encuentran los decesos de Frankie Dante (cantante), Carlos Alas del Casino (cantante), Miguelito García (cantante), Carter Jefferson (saxofonista), Coralia López (pianista), Lorenzo Hierrezuelo (cantante), Justo Vega (compositor) y Ramón Cabrera (compositor), entre otros, cantantes y músicos de la mayor importancia en la música cubana, la salsa y el jazz latino.
No existen muchos documentos sonoros disponibles, en los cuales podamos conocer las impresiones de Louie Ramírez, acerca de la música latina, sus prácticas y los intríngulis como negocio y ámbito artístico. No obstante, existen cerca de una veintena de discos como solista, centenares de arreglos y producciones musicales, con las cuales construir una idea clara acerca del músico y su elaboración artística.
Talento y disposición artística
El timbalero, pianista, vibrafonista, arreglista, compositor y productor Louie Ramírez (Nueva York 28-02-1938 o 1941/07-06-1993), estudió piano clásico a los siete años de edad, luego adelantó su aprendizaje formal de percusión y orquestación en la Escuela de Música Julliard con los reconocidos profesores Hall Overton y Morris Goldenberg. Ramírez basó su ejecución en el timbal, luego de tomar como modelo al timbalero Johnny Rodriguez, según Andy González. Debutó en 1956 como vibrafonista, reemplazó a Pete Terrace, en el grupo de su tío el pianista Joe Loco. Ramírez es coautor, junto a Johnny Pacheco, y arreglista del popular número de pachanga El Güiro De Macorina, grabado por la charanga del flautista dominicano en el álbum LP Pacheco y su Charanga Vol. 1 (Alegre, 1960), con los cantantes Leonel Brenet (cubano) y Elliot Romero (puertorriqueño), interpretado decenas de veces en el club Tritons del Bronx, ‘La casa de la pachanga’ en Nueva York. Éste número fue grabado también por Arthur Murray, con Mario Bauzá como director musical, en el elepé Música para bailar (RCA, 60’s). Murray es recordado por su labor como profesor de baile de música latina, especializado en la creación de coreografías para las más arrebatadoras músicas de moda en los años cincuenta y sesenta. El gusto de Ramírez por la pachanga no fue aislado, en su primera grabación discográfica como líder incluyó el número Qué pachanga, grabado posteriormente por Leandro Roque y su agrupación, también por el colombiano René Grand (sanandresano), bajo el nombre Sigue la gente. Realizó arreglos para Joe Cuba y Charlie Palmieri, en los primeros años de la década del sesenta.
Participó como timbalero en el disco Latin Jazz Quintet con Felipe Phil Díaz y Eric Dolphy (UA, 1960). Grabó la percusión en el espléndido disco de jazz latino Jazz spagnole (Alegre, 1961), con el conguero Sabú Martínez. En 1962 Ramírez interpretó güiro y xilófono en una sesión de grabación del pianista neoyorkino Charles Fox, realizador de bandas sonoras para películas, el cual grabó algunas producciones destacadas, con números instrumentales sobresalientes como Macho. Fue el vibrafonista del álbum Tributo a Noro Morales (Alegre, 1964) grabado por Kako’s New York After Hour Orchestra. Participó como vibrafonista y percusionista en las grabaciones de Cexta All Stars acaecidas durante los años sesenta. En 1966 graba con un sexteto el tema Descarga de dos pianos, interpretado a dos pianos con Charlie Palmieri, guardado por años hasta ser incluido en el disco reeditado Saxofobia plus (Mucho Music, 1993), junto a Nicky Marrero (timbal), Joe Santiago (claves), Chencho Rivera (bajo) y Kako (congas). Participó luego como vibrafonista en el disco Boogaloo in apartament 41 del percusionista Ozzie Torrens, en este disco figura el excelente tema Way out mambo, firmado por Ramírez. Participó como timbalero con Charlie Palmieri en el disco Latin bugalú (ATCO, 1967). Actuó como timbalero en las primeras grabaciones de Fania All Stars en el club Red Garter. Organizó una banda musical para trabajar de planta en el club El Corso de Nueva York, con la cual acompañó al cantante santurcino Pete Bonet, junto a Eddie Martínez y Ray Maldonado como parte de ese grupo. Con Pete Bonet grabó dos discos fantásticos de salsa: The odds are one (Swinger, 1969) y Beautiful people (Fania, 1971). El Corso estaba ubicado en la calle 86 de Mannhattan, inaugurado en 1968, propiedad de Tony Raimone. Apareció como vibrafonista en el disco de la orquesta The Salsa All Stars, a fines de los años sesenta. Hizo parte de la orquesta de Tito Rodríguez, junto a Mario Rivera, Eddie Martínez, Víctor Paz, Ángel René y Bobby Valentín, entre otros, el 2 febrero de 1973 en el Madyson Square Garden de Nueva York, última actuación pública del inolvidable cantante puertorriqueño. Grabó con éste cantante el excelente disco Algo Nuevo (TR, 1972). Participó como vibrafonista en el disco El Party (UA, 1973) de la maravillosa orquesta La Crema de Nueva York. Acompañó con su orquesta al cantante puertorriqueño Raúl Marrero en la grabación del elepé Salsa y sabor (1974). Participó como productor e intérprete del sintetizador en el disco Night lite de la banda de latin rock Benítez & Nebula (Vaya, 1976). Tomó parte en la sesión de grabación del quinto álbum de Alegre All Stars Perdido (Alegre, 1977), como vibrafonista. Con Fania All Stars grabó como invitado en los discos Rhythm machine (Fania, 1977) y Spanish fever (CBS, 1978).
Producción solista: años sesenta y setenta
René Moreti, propietario del sello REMO, propició la grabación de su primer disco Introducing (REMO, 1964), como líder de banda, en el cual contó con los cantantes Víctor Velásquez y Chivirico Dávila, junto al conguero Ozzie Torrens. Según las notas discográficas de Bob Rolontz incluidas en el disco Latin au go go (ATCO, 1965), Louie Ramírez, creó su orquesta en el verano de 1964, junto a su socio Ozzie Torrens. En ese álbum Ramírez interpretó también órgano. La banda hasta ese año había tocado en clubes como el Palladium, Village Gate y Malibú Beach Club de Long Island. Con su Conjunto Changó grabó la popular canción El Títere, interpretada por Willie Torres, incluida originalmente en el álbum Vibes Galore (Alegre, 1965), grabada luego por Ramírez y su orquesta con el cantante Rudy Calzado, y en 1986 realizó una tercera versión con el cantante Ray de la Paz. En Puerto Rico Tommy Olivencia realizó una versión con el sonero Chamaco Ramírez; en Colombia, Pabonny y su grupo de Medellín hizo lo propio. El son montuno Échale grasa, incluido en el disco Good news (Fania, 1968), fue grabado en Cuba por el conjunto de Luis Santi y la Charanga Novedades. El disco Latin au go go (Atco, 1965) incluyó el fantástico número Mueve la cadera, grabado también por el Sexteto La Playa, en el cual Ramírez registra su mejor solo de timbal. En la canción Tumbando caña interviene una cantante femenina, no identificada en el disco, quizá se trata de Linda Leyda (¡?). La primera versión de la famosa canción El títere, interpretada por Rudy Calzado, aparece incluida en el disco Alí babá (Fania, 1968), junto a destacados números como Yambú y Cachita, entre otros. Louie Ramírez realizó una sesión de grabación, la cual tan solo es conocida en la matriz original, al parecer no fue puesta en circulación comercial, no posee nombre genérico, circula en la actualidad como Ramírez and his orchestra (A&R, Ralph Lew produc.) tan solo incluye los nombres de nueve canciones incluidas, entre las cuales se destacan Guayando, Vibes in G Minor -grabada luego como Geisha girl-; Yo gozo en silencio –grabada con anterioridad por Joe Cotto y su orquesta- y Listen Louie, grabada también por Joe Acosta y Los Empresarios.
El excelente registro sonoro En el corazón del Harlem español (Mercury, 1968) contiene tres composiciones destacadas de Louie Ramírez: Café y pan -versionado por el Sexteto La Playa y Los Diferentes (de Colombia)-, The crazy one (un loco) -versionado por Máximo Torres y su grupo- y Oigo un bembé, grabado luego por Ramírez con Pete Bonet. El disco Típico (UA, 1974) contiene canciones cubanas grabadas en la isla, como Caminante y laborí, grabada por Ernesto Duarte y su orquesta; Perro que ladra, grabada por el conjunto Estrellas de Chocolate; Sabroso guaguancó,
grabado por el conjunto Sonora Matancera y el son montuno Tocoloro, grabado por Arsenio Rodríguez y su conjunto. El número La tierra da, fue grabado en Nueva York por Vicentico Valdés. Chico Álvarez diseñó la carátula de este álbum, grabado el 15 septiembre de 1973. El disco A Different Shade of Black (Cotique, 1976), incluyó destacados números como Barrio nuevo y Salsa. Louie Ramírez & Amigos (Cotique, 1978), es uno de los discos más populares entre los melómanos de línea ‘dura’, contó con los cantantes Rubén Blades, Camilo Azuquita y Adalberto Santiago. El disco Salsa progresiva (Cotique, 1979), contó con los cantantes Tito Allen (Juan Simón, Sabroso guaguancó), Ismael Quintana (Orgullo de la montaña) y Jimmy Sabater (Sha-la means I love you).
Una nueva década: ¡la salsa tipo balada se impone!
El origen del término salsa ‘dura’ es relacional, surge como respuesta a la salsa tipo balada -y su producción masiva en los años ochenta- en términos discursivos, alude al estilo de salsa precedente, también denominado clásico. La grabación de una balada con arreglo de música salsa, no surge con Louie Ramírez, de hecho en el pasado diferentes agrupaciones habían grabado canciones de ese tipo. Lo verdaderamente novedoso de Louie Ramírez, fue la grabación de un álbum completo enfocado en recrear un repertorio de canciones popularizadas en el ámbito de la balada con una alta incidencia comercial. De tal manera, el abordaje propuesto por Ramírez -arreglos e intencionalidad musical-, se convirtió en una cómoda tendencia para muchos intérpretes posteriores. Ramírez en 1987 intentó resarcir musicalmente algunos números popularizados de la tendencia comercial imperante, mediante un abordaje instrumental con solistas como Paquito D’ Rivera en el disco Sexy salsa. El cantante Chegui Ramos era el designado para cantar en la sesión de grabación del disco Noche caliente, pero no llegó y fue reemplazado por Ray De la Paz.
Paralelamente, Ramírez inicio la década del ochenta como solista, con el disco Salsero (Cotique, 1980), en el cual incluyó a los cantantes Adalberto Santiago, Néstor Sánchez, Gerard Grimaud y Gaby Santiago. En 1984 editó el disco Media noche diferente (Congo, 1984), con Ray de la Paz y el cantante colombiano Saulo Sánchez, ex grupo Niche.
El asocio de Ramírez con los productores Humberto Corredor y Sergio Bofill, suscitó la grabación de una serie de discos en 1984 con el cantante nuyorican Ray de la Paz: ¡Con caché! (1984), Alegres y románticos (1985), Sabor con clase (1986) y A tribute to Cal T’Jader (1986).
El disco Louie Ramírez y Súperbanda (Faisán, 1987) contó con los cantantes Jorge Maldonado y Tony Vega, se incluyeron números como Feo pero sabroso, grabado originalmente como Feo como el oso. El elepé El genio (L&T, 1989), incluyó Colombia salsera un salsoso homenaje a nuestra patria. Participaron llos cantantes Carlos El Grande Ferrer, Tito Allen, Sammy González Jr y willie Gómez. El disco Louie Ramirez y sus amigos (Cache, 1990), incluyó la canción Amando y soñando, interpretada por Frankie Morales. En 1991 se editó el disco de jazz latino The King of latin vibes (Sugar), grabado tres años antes en el Festival de Jazz de Montreal, con la participación de Piro Rodríguez, Mario Rivera y Ricky Rodríguez, entre otros, y la interpretación de números como Geisha girl –grabado por Ramírez en los años sesenta bajo el título Vibes in G minor-, Bamboléate, Midnight sun y Suavecito, entre otros.
En 1993 preparaba la grabación de un nuevo disco, el cual sería editado por la discográfica RMM, pero un fulminante ataque cardíaco acabó con su vida el 7 de junio de ese año. Dos semanas después, el 24 de junio, recibió un homenaje póstumo en Puerto Rico, con la presencia de músicos como Ray Barretto y Tito Puente. En Cali, el radiodifusor Luis Enrique Kike Escobar realizó el 10 de julio de 1993 en su programa radial Alma Latina (emisora Radio 24 A.M.), un homenaje póstumo. Similar trabajo llevó a cabo el radiodifusor Gary Domínguez en su programa Noche Latina (Armony Estéreo), en noviembre de 1993, emisión con entrevista realizada a Louie Ramírez.
Louie Ramírez murió sin obtener el reconocimiento público de la industria del disco, en compensación el irrestricto respeto de los melómanos del mundo de la salsa supone un eterno reconocimiento, aspiración máxima de cualquier artista consciente de su trabajo.
Agradecimientos a German Marin y a Juancho producciones